Deliciosa receta tradicional y auténtica de tapa de patatas bravas

Las patatas bravas, una tapa tradicional y auténtica en España, son irresistibles en cualquier bar. La auténtica salsa brava se destaca por su picante moderado, sin incluir tomate. Las patatas se preparan cortándolas en trozos irregulares y friéndolas hasta que se doren. Luego se les añade la deliciosa salsa brava, sin cubrirlas por completo, y se espolvorean con perejil picado. Estas patatas se sirven calientes y se pueden acompañar con una cerveza fría y unos boquerones en vinagre caseros. ¡Una combinación perfecta para disfrutar de una tapa española clásica!

Ingredientes necesarios

Patatas de buen tamaño

Para preparar esta deliciosa tapa, necesitaremos patatas de buen tamaño, preferiblemente de piel fina y firmes al tacto. Las patatas serán el ingrediente principal y base de las patatas bravas.

Cebolla

Una cebolla será necesaria para aportar sabor y aroma a la salsa brava. La cebolla se picará finamente y se empleará en el sofrito para darle un toque especial a esta receta tradicional.

Pimentón dulce y picante

El pimentón será el encargado de brindarle el característico sabor a las patatas bravas. Utilizaremos tanto pimentón dulce como pimentón picante, para equilibrar el nivel de picante de la salsa según nuestros gustos.

Harina de trigo

La harina de trigo será utilizada para espesar la salsa brava y conseguir una textura adecuada. Aportará cremosidad y cuerpo a la salsa, resaltando su sabor y permitiendo que se adhiera de manera perfecta a las patatas.

Caldo de pollo

El caldo de pollo será el líquido que incorporaremos a la salsa brava para darle más sabor y un toque extra de autenticidad. Aportará jugosidad y complejidad a la receta, realzando los sabores de cada ingrediente.

Aceite de oliva virgen extra

El aceite de oliva virgen extra será utilizado tanto para freír las patatas como para el sofrito de la cebolla. Aportará un delicioso sabor y aroma a las patatas bravas, convirtiéndolas en una auténtica delicia para el paladar.

Perejil fresco

El perejil fresco será el encargado de añadir un toque de frescura y decoración final a nuestras patatas bravas. Se picará finamente y se empleará para espolvorear las patatas antes de servirlas, aportando un color verde vibrante.

Elaboración de la auténtica salsa brava

Sofreír la cebolla con aceite de oliva

En una sartén grande, añadimos un chorrito de aceite de oliva y la cebolla finamente picada. Sofreímos a fuego medio hasta que la cebolla se vuelva transparente y suave, removiendo de vez en cuando para evitar que se queme.

Añadir pimentón dulce y picante

Una vez que la cebolla esté lista, añadimos el pimentón dulce y picante. Es importante mezclar bien para que los sabores se integren correctamente. El pimentón es el ingrediente clave que le dará el característico sabor a la salsa brava.

Incorporar la harina y cocinar hasta formar un roux

A continuación, incorporamos la harina de trigo y la cocinamos durante unos minutos, moviendo constantemente con una cuchara de madera. Este paso es importante para formar un roux, una mezcla de harina y grasa que espesará nuestra salsa.

Agregar caldo de pollo y cocinar durante diez minutos

Poco a poco, vamos añadiendo el caldo de pollo caliente a la mezcla, removiendo constantemente con la cuchara de madera. Cocinamos la salsa a fuego medio-bajo durante unos diez minutos, hasta que se espese y adquiera una textura suave y homogénea.

Triturar la salsa y colarla finamente

Una vez que la salsa haya cocinado el tiempo necesario, la retiramos del fuego y la trituramos con una batidora de mano hasta obtener una textura muy fina y sin grumos. Después, la pasamos por un colador fino para asegurarnos de que no quedan restos de cebolla o pimentón sin triturar.

¡Y ya está! La auténtica salsa brava para las patatas bravas está lista para ser disfrutada. Su sabor picante y especiado le dará ese toque único a nuestras patatas. Ahora podemos pasar a la siguiente parte de la receta y preparar las patatas bravas en sí.

Preparación de las patatas bravas

Las patatas bravas son una deliciosa tapa tradicional en España que se caracteriza por su sabor auténtico y su textura crujiente. A continuación, te mostramos los pasos necesarios para prepararlas de manera fácil y rápida:

Pelar, cortar y freír las patatas en aceite de oliva

Comienza pelando las patatas de buen tamaño y córtalas en trozos irregulares. Luego, en una sartén con abundante aceite de oliva virgen extra, fríe las patatas a fuego medio-alto hasta que estén doradas y crujientes. Asegúrate de removerlas de vez en cuando para que se cocinen de manera uniforme. Una vez listas, retíralas del fuego y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Escurrir las patatas y añadir la salsa brava

Una vez que las patatas estén escurridas y hayan perdido el exceso de aceite, transfíerelas a un plato o bandeja apta para servir. Es en este momento donde llega la estrella de la tapa: la salsa brava auténtica. Vierte la salsa sobre las patatas, pero sin cubrirlas totalmente, para que conserven su textura crujiente. Si deseas un sabor más picante, puedes añadir más pimentón picante o incluso una guindilla de cayena.

Espolvorear con perejil picado y servir caliente

Para darle un toque de frescura y color, espolvorea las patatas bravas con perejil fresco picado justo antes de servirlas. Esto le añadirá un aroma especial y una presentación aún más apetitosa. Recuerda que las patatas bravas se disfrutan mejor cuando están calientes, por lo que te recomendamos servirlas de inmediato.

¡Ya estás listo para degustar unas deliciosas patatas bravas de forma tradicional y auténtica! Esta tapa española es perfecta para compartir con amigos y disfrutar de un buen momento. Combínala con una cerveza fría y unos boquerones en vinagre caseros para una experiencia gastronómica completa y auténtica.

Acompañamientos y sugerencias

La tapa de patatas bravas, con su deliciosa combinación de sabores, se puede disfrutar aún más con algunos acompañamientos y sugerencias que realzan su sabor único. Aquí te presentamos algunas opciones:

Cerveza fría y boquerones en vinagre

Nada mejor que una refrescante cerveza fría para complementar las patatas bravas. Su frescura y efervescencia equilibran el picante de la salsa brava, creando una armonía de sabores en el paladar. Además, si quieres incrementar aún más las texturas y sabores de la experiencia, puedes añadir unos boquerones en vinagre caseros. Estos deliciosos pescaditos marinados en vinagre aportarán un toque extra de acidez y frescura, completando así una combinación perfecta junto a las patatas bravas.

Otras recetas relacionadas: patatas fritas y alioli

Si bien las patatas bravas son una tapa con una personalidad propia, existen otras recetas relacionadas que también son muy populares en España. Las patatas fritas, por ejemplo, son una opción clásica y sencilla de disfrutar de unas deliciosas patatas crujientes. Puedes acompañarlas con diferentes salsas, como el alioli, una emulsión de ajo y aceite de oliva que aportará un sabor intenso y cremoso a tus patatas. Estas opciones son ideales para aquellos que prefieren sabores más suaves y tradicionales, pero igual de deliciosos.